Tu Poema de Amor

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Inicio . García Lorca EL MACHO CABRÍO

EL MACHO CABRÍO

1919

El rebaño de cabras ha pasado

junto al agua del río.

En la tarde de rosa y de zafiro,

llena de paz romántica,

yo miro

el gran macho cabrío.

 

¡Salve, demonio mudo!

Eres el más

intenso animal.

Místico eterno

del infierno

carnal...

 

¡Cuántos encantos

tiene tu barba,

tu frente ancha,

rudo Don Juan!

¡Qué gran acento el de tu mirada

mefistofélica

y pasional!

 

Vas por los campos

con tu manada,

hecho un eunuco

¡siendo un sultán!

Tu sed de sexo

nunca se apaga;

¡bien aprendiste

del padre Pan!

 

La cabra

lenta te va siguiendo,

enamorada con humildad;

mas tus pasiones son insaciables;

Grecia vieja

te comprenderá.

¡Oh ser de hondas leyendas santas

de ascetas flacos y Satanás,

con piedras negras y cruces toscas,

con fieras mansas y cuevas hondas,

donde te vieron entre la sombra

soplar la llama

de lo sexual!

 

¡Machos cornudos

de bravas barbas!

¡Resumen negro a lo medieval!

Nacisteis junto con Filomnedes

entre la espuma casta del mar,

y vuestras bocas

la acariciaron

bajo el asombro del mundo astral.

 

Sois de los bosques llenos de rosas

donde la luz es huracán;

sois de los prados de Anacreonte,

llenos con sangre de lo inmortal.

 

¡Machos cabríos!

Sois metamorfosis

de viejos sátiros

perdidos ya.

Vais derramando lujuria virgen

como no tuvo otro animal.

 

¡Iluminados del Mediodía!

Pararse en firme

para escuchar

que desde el fondo de las campiñas

el gallo os dice:

¡Salud!, al pasar.