Tu Poema de Amor

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Inicio Neruda LOS VERSOS DEL CAPITÁN ODA Y GERMINACIONES V

ODA Y GERMINACIONES V

Hilo de trigo y agua

de cristal o de fuego,

la palabra y la noche,

el trabajo y la ira,

la sombra y la ternura

todo lo has ido poco a poco cosiendo

a mis bolsillos rotos

y no sólo en la zona trepidante

en que amor y martirio son gemelos

como dos campanas de incendio,

me esperaste, amor mío,

sino en las más pequeñas

obligaciones dulces.

El aceite dorado de Italia hizo tu nimbo,

santa de la cocina y la costura,

y tu coquetería pequeñuela,

que tanto se tardaba en el espejo,

con tus manos que tienen

pétalos que el jazmín envidiaría

lavó los utensilios y mi ropa,

desinfectó las llagas.

Amor mío, a mi vida

llegaste preparada

como amapola y como guerrillera:

de seda el esplendor que yo recorro

con el hambre y la sed

que sólo para ti traje a este mundo,

y detrás de la seda

la muchacha de hierro

que luchará a mi lado.

Amor, amor, aquí nos encontramos.

Seda y metal, acércate a mi boca.

 

 

VI

Y porque Amor combate

no sólo en su quemante agricultura,

sino en la boca de hombres y mujeres,

terminaré saliéndoles al camino

a los que entre mi pecho y tu fragancia

quieran interponer su planta oscura.

De mí nada más malo

te dirán, amor mío

de lo que yo te dije.

Yo viví en las praderas

antes de conocerte

y no esperé el amor sino que estuve

acechando y salté sobre la rosa.

Qué más pueden decirte?

No soy bueno ni malo sino un hombre,

y agregarán entonces el peligro

de mi vida, que conoces

y que con tu pasión has compartido.

Y bien, este peligro

es peligro de amor, de amor completo

hacia toda la vida, hacia todas las vidas,

y si este amor nos trae

la muerte o las prisiones,

yo estoy seguro que tus grandes ojos,

como cuando los beso

se cerrarán entonces con orgullo,

con doble orgullo, amor,

con tu orgullo y el mío.

Pero hacia mis orejas vendrán antes

a socavar la torre

del amor dulce y duro que nos liga,

y me dirán: "Aquella

que tú amas,

no es mujer para ti,

por qué la quieres? Creo

que podrías hallar una más bella,

más seria, más profunda,

más otra, tú me entiendes, mírala qué ligera,

y qué cabeza tiene,

y mírala cómo se viste

y etcétera y etcétera".

Y yo en estas líneas digo:

así te quiero, amor, amor,

así te amo, así como te vistes

y como se levanta

tu cabellera y como

tu boca se sonríe,

ligera como el agua

del manantial sobre las piedras puras,

así te quiero amada.

Al pan yo no le pido que me enseñe

sino que no me falte

durante cada día de la vida.

Yo no sé nada de la luz, de dónde

viene ni dónde va,

yo sólo quiero que la luz alumbre,

yo no pido a la noche

explicaciones,

yo la espero y me envuelve,

y así tú, pan y luz

y sombra eres.

Has venido a mi vida con lo que tú traías,

hecha

de luz y pan y sombra te esperaba,

y así te necesito,

así te amo,

y a cuantos quieran escuchar mañana

lo que no les diré, que aquí lo lean,

y retrocedan hoy porque es temprano

para estos argumentos.

Mañana sólo les daremos

una hoja del árbol de nuestro amor, una hoja

que caerá sobre la tierra

como si la hubieran hecho nuestros labios,

como un beso que cae

desde nuestras alturas invencibles

para mostrar el fuego y la ternura

de un amor verdadero.