Tu Poema de Amor

  • Aumentar fuente
  • Fuente predeterminada
  • Disminuir fuente

LA PREGUNTA

Amor, una pregunta

te ha destrozado.

 

Yo he regresado a ti

desde la incertidumbre con espinas.

 

Te quiero recta como

la espada o el camino.

 

Pero te empeñas

en guardar un recodo

de sombra que no quiero.

 

Amor mío,

compréndeme,

te quiero toda,

de ojos a pies, a uñas,

por dentro,

toda la claridad, la que guardabas.

 

Soy yo, amor mío,

quien golpea tu puerta.

No es el fantasma, no es

el que antes se detuvo

en tu ventana.

Yo echo la puerta abajo:

yo entro en toda tu vida:

vengo a vivir en tu alma:

tú no puedes conmigo.

 

Tienes que abrir puerta a puerta,

tienes que obedecerme,

tienes que abrir los ojos

para que busque en ellos,

tienes que ver cómo ando

con pasos pesados

por todos los caminos

que, ciegos, me esperaban.

 

No me temas,

soy tuyo,

pero

no soy el pasajero ni el mendigo,

soy tu dueño,

el que tú esperabas,

y ahora entro

en tu vida,

para no salir más,

amor, amor, amor,

para quedarme.