Fue un día como hoy que empezó tu historia
maravillosa, dulce y radiante.
Increíblemente la veo en tus ojos, zafiros o luceros parecen ser.
Con tu sonrisa creas alrededor universos de flores y de versos, manantiales de ternura y de amor.
Eres una estrella hecha mujer, sin duda la más bella que yo pudiese ver.
Hoy quiero desearte lo mejor que existe, olas inmensas de bendiciones y el mayor de los éxitos, mi amor.